“Me estoy dando cuenta que mi iluminación se está convirtiendo cada vez
más simple a medida que voy ganando experiencia, permitiendo que la
cámara pueda moverse con más facilidad. Siempre opero yo mismo y por lo
tanto soy muy consciente de la flexibilidad que necesito como operador.
Con esto en mente siempre planteo la iluminación a partir de la
situación y no de un solo tiro. Es inútil iluminar un primer plano,
aunque sea brillantemente, si la iluminación utilizada no está
justificada en una visión más amplia.” Roger Deakins
Sobretodo ahora, con el uso más indiscriminado de las DSLR, la realización y la dirección de fotografía en muchos casos se deben simplificar y destilar hasta llegar a entender los elementos básicos que componen, tanto una secuencia, una escena y un plano.
Personalmente también me gusta operar y quiero siempre ofrecer al sujeto total libertad, ésa es, quizás la única forma de conseguir que las cosas pasen de forma natural y fluída. Buscar las dinámicas que hacen que funcione una escena y permitir a los actores desarrollarla según las energías que se necesiten en ese momento. La cámara es siempre, el observador externo, que busca el mejor encuandre, el mejor ángulo, la mejor luz y el mejor movimiento para expresar ese momento preciso en el que todo confluye.